El 94,7% de las pymes en San Luis vio afectados sus ingresos por la pandemia
Los resultados fueron arrojados por un estudio de la Fundación Emprender en 304 emprendimientos en la provincia. Las principales causas fueron la falta de clientes, que los productos o servicios no son de primera necesidad, la imposibilidad de reinventarse para otra actividad en el corto plazo y problemas de abastecimiento.
La Fundación Emprender hizo una investigación para determinar el impacto que produjo el aislamiento obligatorio en el sector productivo de San Luis. En este sentido, se llevó adelante una encuesta desde el 2 de mayo al 7 de junio en 304 entidades.
Los resultados evidenciaron que el 94,7% vio afectados sus ingresos de manera negativa desde el comienzo de la cuarentena. De esa cantidad el 72% tuvo pérdidas mayores el 50%; para el 22% fue entre el 25% y el 50%; mientras que para el 6% el número fue inferior
En las causas pudieron elegir tres opciones, un 64% lo adjudicó a la falta de clientes, un 49,7% a que el producto o servicio no es de primera calidad, y un 27,4% a la imposibilidad de reinventarse en otra actividad en el corto plazo.
Al mismo tiempo, el 27, 1% tuvo problemas de abastecimiento, un 25,3% aduce que el sector turístico a su principal cliente y un 21,9% tiene suspendida la Cadena de Pagos.
En otra pregunta del cuestionario distribuido a través de diferentes redes sociales, el 57,6% de los emprendedores expuso inconvenientes para la recepción de insumos o servicios de proveedores de otras localidades o provincias.
Aquellos que tuvieron estos problemas, identificaron entre las causales el aumento de precios, demoras o impedimos de llegada del transporte, aumentos en el costo de logística, desabastecimiento por cierre de fábricas o disminución en la producción, dificultades para el ingreso de personal técnico, falta de materia prima importada y mala calidad del servicio de internet de la provincia.
La Fundación Emprender también buscó conocer la opinión ante la posibilidad de trabajar en forma conjunta con otras compañías locales del mismo rubro o proveedores nuevos más cercanos. El 52% tuvo en cuenta esa opción.
De quienes se pronunciaron de manera negativa a la consigna anterior, 45,7% reconoció una estrategia para continuar generando ingresos.
Asimismo, fueron consultados sobre si tenían su emprendimiento formalizado. 67% dijo que si, el 26% que no y el restante 7% no sabe/no contesta.
Finalmente, la encuesta indagó en quienes no vieron perjudicada su economía por la pandemia. El 81,3% respondió que podía seguir con sus actividades normalmente, y el número restante manifestó complicaciones para trabajar.
“En lo relacionado al abastecimiento, los protocolos establecidos en San Luis han provocado demoras y restricciones en los ingresos de materias primas, insumos y servicios profesionales. Lo cual ha traído aparejado principalmente el aumento considerable de los precios, disminución de la productividad y escases”, sostuvo la fundación en las conclusiones del trabajo.
A esto, agregó que cuando las dificultades para la entrada de materias primas, insumos y servicios profesionales imperan, es “fundamental la vinculación empresarial”.
“Es crucial crear mecanismos para integrar y desarrollar el tejido productivo provincial para que las empresas conozcan, desarrollen y se vinculen con nuevos proveedores locales”, subrayaron desde la institución presidida por María Eugenia Gallardo.
En otro punto, reflexionaron en que “el comercio electrónico ha crecido, pero se debe entender que no todas las pymes están en condiciones de desarrollar ventas online. Ya sea porque venden servicios que no se adaptan a ella, por desconocimiento o incapacidad para implementar las nuevas formas de comercialización”.
Respecto a los cambios en los hábitos de consumo puntualizaron en la importancia de “estudiar el comportamiento de los clientes para poder anticiparse a sus necesidades de manera tal que se desarrollen bienes y servicios acordes a ellos”.
“Las pymes que así lo entiendan y actúen, estarán un poco más fortalecidas, o se recuperarán más rápido luego de esta situación que no podemos controlar”, consideraron.
A su vez, hicieron énfasis en el rol de los gobiernos y las instituciones para “la adquisición de estas capacidades”. Y tuvieron en cuenta que los emprendedores están teniendo “serios problemas para trabajar, abastecerse, cobrar, vender, distribuir, pagar salarios y acceder a los programas oficiales”.
De la misma manera, Emprender resaltó que cuando una compañía cierra “es poco probable que otra la sustituya” y que esto “conlleva un impacto negativo sobre la ocupación, consumo y sobre todo, en la dignidad de las personas”.
Por eso, señalaron que los gobiernos nacionales, provinciales y municipales deben actuar a fin de “sostener y promover” al sector con “políticas de fomento, fiscales y subsidios”.
“Ante un contexto de relevantes contingencias, resulta de suma importancia que los estados, las instituciones y las empresas articulen su accionar. Subrayamos: `Salvar a los emprendedores y a las Pymes es, salvar a la gente´”, concluyeron.